Pintura Intuitiva
Practicando la Magia del Corazón
Muchos me han preguntado en qué consisten mis clases de pintura intuitiva, y yo debo contestar, que se trata de practicar la magia del corazón…
Sí, ¡¡¡¡es así!!! solo se trata de soltar, confiar, arriesgarse y jugar.
Se trata de estar abierto a todas las posibilidades que se nos presenten, se trata de un viaje, el que vamos a disfrutar, sin importarnos a donde lleguemos, sin expectativas, solo viviendo el presente, sintiendo cada trazo o marca nueva en el lienzo y confiando en nuestra intuición.
No hay errores, todo se puede transformar, nada es permanente, de eso se trata…de soltar y dejar lugar para lo que empiece a fluir.
Tampoco hay apuro, no apresuro las pinturas, hay que dejarlas salir, están dentro de nosotros solo tenemos que saber abrir la puerta, y para eso necesitamos confiar en nosotros, y mostrarnos tal cual somos, sin importarnos lo que piensen los demás, no existe aquí la crítica, y menos aún la crítica interna, yo no me juzgo.
Nos convertimos en audaces exploradores y para eso debemos asumir riesgos, ir más allá, más allá de nuestros propios límites, límites impuestos o decretados, que podemos desintegrar, si dejamos de lado las ideas preconcebidas.
Disfrutamos el momento presente, nos relajamos, participamos de un divertido juego.
No esperemos resultados nuevos, si siempre hacemos las mismas cosas, y si las cosas que hacemos no resultan, ¿porque nos resistimos tanto a probar algo distinto?
Dejemos de controlar, no hagamos nada, dejémonos llevar y solo observemos. Sí, observemos, pero…un poco más allá.
Desde chicos se nos ha enseñado a confiarnos solo de lo que podemos experimentar con nuestros cinco sentidos, pero… y si abrimos nuestra mente
y con espíritu libre, empezamos a sentir aquello que no es tan evidente a primera vista?, ¿y si dejamos que surjan otras cosas? esas cosillas, que solemos llamar coincidencias, sincronicidades, epifanías, etc.
Hagamos algo así como un experimento, sigamos las señales, seamos receptivos a esa luz que de repente se enciende dentro nuestro, escuchemos ese diálogo interior que se produce con nuestro otro yo que es más intuitivo, más confiado, más sabio, nuestro yo superior.
Dejemos que la magia suceda, solo hay que dejar que fluya y no poner nuestros propios obstáculos.
Y así en la pintura como en la vida misma, que no nos asuste enfrentarnos con el lienzo en blanco, comencemos sin miedo nuestra primera marca, esa primera nos llevará a las siguientes, solo confiando que hay algo más allá que nos impulsa hacia donde debemos llegar, siempre “practicando la magia del corazón”
Respirá profundo y vení a pintar conmigo.
Vení a buscar tu inspiración.
